¿Vas a hacer ejercicio? Toma un puñado de frutos secos, como avellanas ricas en calcio, te protegerá frente a calambres y agujetas. Antes y después del ejercicio, sobre si todo es intenso o hace tiempo que no haces deporte, hay que realizar siempre estiramientos. Para preparar los músculos hay que calentar e ir aumentando poco a poco la intensidad del ejercicio. Además, si durante la actividad física sacudes los músculos favorecerás la circulación de la sangre.
Las agujetas son micro-roturas de las fibras musculares producidas por un ejercicio físico intenso. Te dejamos unos consejos para que puedas decirle adiós a tus agujetas.
1. Limonada anti-agujetas.
Añade una cucharada sopera de azúcar, otra de jugo de limón y bicarbonato sódico a medio litro de agua. Bebe la limonada durante el ejercicio y hasta una hora de terminar para evitar tener agujetas.
2. Agua con hielo.
Para aliviar el dolor muscular aplica sobre los músculos doloridos una bolsa de plástico con cierre a presión llena de agua con hielos durante 20 minutos. Te ayuda a desinflamar y recuperarte antes.
3. Baño de tomillo revitalizante.
Haz una infusión añadiendo un puñado de tomillo a un litro de agua hirviendo y deja reposar unos minutos. Vierte la infusión en el agua caliente de la bañera y relájate dentro. Termina con una ducha caliente relajante con chorros de agua fría desinflamantes.
4. Zumo de naranja y piña.
La acción combinada de vitamina C (naranja) y bromalina (piña) reducen las agujetas. Bebe el zumo natural después del ejercicio.
5. Masaje relajante con aceite de lavanda.
Mezcla una cucharada de aceite de oliva con 5 gotas de aceite esencial de lavanda. Masajea suavemente los músculos con este aceite natural…¡Notarás cómo se relajan!